La Romería a Nuestra Señora de los
Zacatecas.
Por Bernardo del Hoyo Calzada.
La advocación de Nuestra Señora de los
Remedios data desde el año de 1198, aprobada por el Papa Inocencio III, y pasó
a la Nueva España en el siglo XVI. Nos dice el Pbro. Miguel Flores Solís,[1]
en su libro “Nuestra Señora de los Remedios”.[2]
“en 1544 llegaron los primeros franciscanos a Campeche, y en esa misma
fecha levantaron con toda rapidez un hospital, que denominaron de Nuestra
Señora de los Remedios”.
Los franciscanos sin lugar a dudas
propagaron por todo México la devoción a la Virgen de Los Remedios, y así esta
advocación mariana llegó a Zacatecas.
Consta en el primer libro de Cabildo de
Zacatecas, en el año de 1559, el inicio de lo que hoy conocemos como la Romería
de Nuestra Señora de los Zacatecas, el ocho de septiembre, llamada desde
entonces Nuestra Señora de Septiembre, que es la misma advocación de Nuestra
Señora de los Remedios. Y es desde entonces la patrona de la Muy Noble y leal
Ciudad de Nuestra Señora de los Zacatecas. En el primer libro de Cabildo dice
así:
“Y después de lo susodicho, en las minas de los Zacatecas, a siete días
del mes de mayo de mil quinientos y cincuenta y nueve años, se juntaron los
dichos señores diputados con el rector de la cofradía del hospital de Nuestra Señora
de la Concepción de estas minas y dijeron que por cuanto la advocación de las
minas de los Zacatecas, desde el día del descubrimiento de ellas, ha sido y es
llamarse de Nuestra Señora de los Remedios, y porque semejante nombre no se
pierda y por la claridad de la devoción con que se nombró y porque de vaya
adelante la devoción… y parezca en todo tiempo, y por lo que he dicho es y por
la dicha devoción, ordenaban y ordenaron que de hoy en delante, perpetuamente,
para siempre jamás, en cada un año se diga y cante misa y vísperas de la dicha
advocación de Nuestra Señora de los Remedios en la iglesia mayor de estas minas
el día de Nuestra Señora de Septiembre, que es a ocho días del mes de
septiembre de un año, la cual digan los clérigos de estas minas que sirvieren
en la dicha iglesia, y aquel día den velas a las vísperas y misa a todos los
cofrades de la cofradía de la Natividad y la Veracruz, que están hermanadas, y
el mismo día los clérigos sean obligados a hacer procesión alrededor de la
plaza, a la cual dicha procesión, misa y víspera se hallen los cofrades que
hubiere que no tuvieren justo impedimento, so pena de cada una libra de cera
blanca para la dicha cofradía. Y lo mandaron asentar en el libro de la
iglesia”.[3]
Con
este interesantísimo documento podemos decir que desde el primero de enero de
1551, se funda la cofradía del Santísimo Sacramento, con el nombre:
“La Santa Cofradía del Santísimo Sacramento y Santa Concepción de la
Serenísima Virgen y Madre de Dios, señora nuestra en las minas de Nuestra
Señora de los Remedios, provincia de los Zacatecas”.[4]
Aun sin saber la fecha, pero que puede
ser en este mismo año de 1551, se funda otra cofradía, llamada de la Natividad
y la Santa Vera Cruz, (que están hermanadas). También por estos años se funda
el hospital de Nuestra Señora de la Concepción. Y también que se llama la
Parroquia Mayor, y que la fundación del hospital y cofradía de la Veracruz, es
donde hoy está el Templo de San Juan de Dios de Zacatecas.
Es importante el documento también por
decirnos como estaban hermanadas las cofradías, la del Santísimo Sacramento con
la de la Concepción de la Serenísima Virgen. La Natividad con la Santa
Veracruz. En 1577 se funda la cofradía del Dulce Nombre de Jesús y Soledad de
Nuestra Señora. Y por este mismo tiempo se funda la cofradía de San Pablo
Primer Ermitaño y la de San Sebastián.
Por el año de 1593 llegó el escudo de la
Muy Noble y Leal Ciudad de Zacatecas, y se nombró al primer Alférez Real y se
hace el Pendón Real, la festividad del ocho de septiembre cobró mejor lucimiento
y se inició el Paseo del Pendón para conmemorar el descubrimiento del Real de
Minas de Zacatecas, el ocho de septiembre. Los siguientes siglos siempre se
conmemoró a Nuestra Señora del ocho de Septiembre, o de Nuestra Señora de los
Zacatecas como patrona de la Ciudad.
El historiador Elías Amador no da una
referencia de cómo se hacían las festividades de la fundación de Zacatecas en
el siglo XVIII, (1758)[5]:
“Celebra anualmente esta agradecida Ciudad el
día ocho de Septiembre, con el Nombre de Conquista, la más dichosa Época de su
felicidad, en que las armas españolas ayudadas del Patrocinio de María,
sujetaron a los Guerreros Indios Chichimecas, que dominaban en esta Provincia,
comenzando desde entonces a rayar en ella la más apacible Aurora, en los
crepúsculos de la fe; día verdaderamente digno de notarse no solo con Estrella,
sino con Lucero, Por esto, el noble Ayuntamiento dispuso el tiempo de las
Fiestas de modo, que se enlazasen una, y otra, por ser ambas el testimonio más
auténtico de la protección de María, para esta Ciudad. Anuncio desde la víspera
este agradecido recuerdo el Señor Alférez Real D. Juan de Rabago, a quien
pertenece de oficio, y sacó de las Casas de Cabildo el Real Pendón, acompañado
de sujetos de distinción, cabalgando sobre hermosos Caballos, amaestrados para
el efecto. El número no fue grande, porque no podía serlo, siendo tan escogido:
pasearon las calles acostumbradas de la Ciudad, vestidos de vistosas galas, y
llevados del mismo aire, con que se movían: los aderezos de cabalgar bordados
de oro, plata, y sedas, más parecían ingeniosas invenciones para la alegría de
un estrado, que para ornato de brutos, si se pueden llamar tales, los que ala
lleve insinuación de la rienda obedecían, como el más juicioso. Coloco el Señor
Alférez su estandarte en el Templo, como Trofeo de la mejor Belona María; y en
la mañana de este día ocho, prosiguieron los cultos, sirviendo de Penegyrista
el Rmo. P. Prior del Convento del Grande Padre San Agustín, Fr. Miguel de
Espinosa, quien supo unir felicísimamente la concurrencia de las Solemnidades
ajustadas a las disposiciones del Levítico, por cuya disposición se celebra en
este sábado de los Meses, el Nacimiento de la nueva Luna, y el Memorial de la
Ley recibida, todo graciosamente acomodado a la Natividad de la mejor Luna
María; a quien se le debe la introducción de la Ley Divina en esta Provincia, y
en este día. Salió gustosísimo el Auditorio aplaudiendo el empeño del Orador; y
aludiendo, a que entre todos, este solo era Superior actual, se valió del
Equivoco para celebrarlo un forastero, que exponía a otro su dictamen en esta
Quintilla
Todos con igual primor
Celebraron los loores
De María; pero Señor,
Entre los Predicadores,
Solo el de hoy, es Superior.”
Orden de la Procesión. Acompañando a la
Santísima Virgen, los Patriarcas de las Religiones,[6] precedían a la procesión Clarines, y cajas,
con estruendo de los cohetes, y ruedas, los cuatro pueblos de Naturales
inmediatos a la ciudad: Tlacuitapan, Chepinque, Sr. San José, y el Niño Jesús.
Concurriendo cada uno con su danza artificiosa en su preferencia de su madre.
Después de las órdenes religiosas del
clero regular venia la del clero secular con la Congregación de San Pedro. Y como nos dice el historiador era para la
celebración de la Jura del Patronato a Nuestra Señora de Guadalupe, esta iba al
último con un nuevo lienzo que se mandó pintar exprofeso para la Jura y
festividad en Septiembre.
Esto nos da un ejemplo de cómo se hacia la
festividad en Septiembre durante todo el siglo XVIII y parte del XIX.
Con motivo de las leyes de Reforma, el
gobierno prohibió cualquier procesión religiosa, clausuró los conventos,
profanó y despojó los templos y conventos, y la tradición del ocho de
septiembre desapareció. Ya no había cofradías, solo años después resurgió la de
San Juan Bautista con las Morismas de Bracho, pero, no sé qué se festejara a la
patrona de la ciudad públicamente, solo en los templos.
Siempre se ha celebrado la
fundación de la ciudad, y a principios del siglo XX, se celebraron en
septiembre los juegos florales, con la coronación de la reina que era elegida
por ganador de la justa literaria, pero, no se hacía homenaje a la patrona de la
ciudad. Luego siguió la feria profana del ocho de septiembre que se juntaba con
la del Grito de Independencia del día 15 de septiembre. Hay pruebas de que n el
año de 1906 ya había Juegos Florales, y siguieron hasta por muchos años más.
Hasta los años 40 en que se inició la Feria Regional de Zacatecas, conmemorando
la fundación e independencia de Zacatecas.
Por un programa de 1926 podemos saber cómo
se realizaban la fiesta del ocho de septiembre para conmemorar la fundación de
Zacatecas:
“Grandes Fiestas en la ciudad de Zacatecas, del 8 al 30 de Septiembre
de 1926, Grandes Exposiciones Nacionales y Regionales de Ganadería, Minería,
Pequeñas Industrias Mecánicas, Manuales, etc.
Verbenas Populares, Gallos Estudiantiles, Eventos Deportivos, Concursos
Artísticos y Literarios. Juegos Florales, Carros Alegóricos, Kermeses, Bailes
Populares, Fiestas Escolares.
Excursiones Automovilísticas a las Carreteras del Sur y Norte del
Estado. Magnificas Serenatas, Fuegos Artificiales.
Grandes Corridas de Toros los días 12, 15 y 19, por los diestros: “Carnicerito”,
“Tato”, y Julián Pasto, del Cartel en México y con ganado de “San Mateo” y
“Malpaso”.
Viaje redondo de todas las Estaciones de los Ferrocarriles Nacionales a
la Ciudad de Zacatecas, con rebaja de precios en todos los pasajes. Habrá toda
clase de Juegos permitido por la Ley. Casa Impresora de Nazario Espinosa. Zacatecas.”
Por los año de 1940 que se hacían
peregrinaciones a la Bufa para celebrar a Nuestra Señora del Patrocinio,
confundiéndose esta festividad con la patrona de la ciudad, que es Nuestra
Señora de los Zacatecas. La festividad de la Virgen del Patrocinio es el 15 de
septiembre, mientras que la advocación y festividad de Nuestra Señora de los
Remedios de los Zacatecas, siempre ha sido el 8 de septiembre.
Hace algunos años, a principios de este
siglo XXI, que surgió de nuevo la Romería a la fundación de la Ciudad y la festividad
del nacimiento de la Virgen María que es el ocho de septiembre, rindiéndole
homenaje a Nuestra Señora de los Remedios de los Zacatecas, con una romería y
carros alegóricos y el Paseo del Pendón Real como se hacía en tiempos pasados.
El Cronista de la ciudad de Zacatecas
Manuel González Ramírez en un periódico local el año pasado de 2015 explicó que para la
segunda mitad del siglo 20 estuvo a punto de desaparecer, pero la señora
Cuquita Mayorga y su familia, junto con un grupo de católicos, rescataron esta
tradición y en la que todavía siguen participando.
No me queda más que decir que hace algunos unos años que don Federico
Sescosse recuperó el Pendón Real, en una tienda de antigüedades y lo donó al
Museo Rafael Coronel, donde se exhibe, y a partir de esta donación se ha
procurado volver a sacar el Pendón Real en la Festividad del Ocho de
Septiembre, y Manuel González Ramírez denunció en un periódico el mal uso que
un joven hacía en la Romería con una copia del Pendón Real. Porque esta
tradición debería de ser aún más solemne en memoria del Alférez Real, que cada
año paseaba con honor el Pendón Real para conmemoras el Nacimiento de la Virgen
María y de la Ciudad de Zacatecas.
Guadalupe, Zac. 26 de julio de
2016.
[1] El
Padre Miguel Flores Solís también publicó el libro “Morismas de Panuco”,
Zacatecas, 1995.
[2] Flores
Solís, Pbro. Miguel, Nuestra Señora de los Remedios Colección “México Heroico”,
editorial Jus. N° 114, 1972, pág. 19:
[3]
Primer Libro de Cabildo de las Minas de los Zacatecas, N° 1, Instituto de
Cultura “Ramón López Velarde”, ISSN 2007 -851X, 2° edición 2014, pág. 39.
[4]
Enciso Contreras, José, Ordenanzas de Zacatecas del siglo XVI y otros
documentos normativos neogallegos, Ediciones del Ayuntamiento de Zacatecas,
Facultad de Derecho UAZ, Serie Elías Amador, 1998, pág. 52.
[5]
Amador, Elías, Bosquejo Histórico de Zacatecas, Tomo I, año 1982, Pág. 524, del
folleto titulado: “Gratitud Zacatecana, o sea Breve Noticia de las Fiestas en
que la Muy Noble y Leal Ciudad de Zacatecas explico su agradecimiento en la
confirmación del Patronato de Nuestra Señora de Guadalupe”. (solo hago un
pequeño extracto de la festividad, pero el Sr. Amador publica en su libro todo
el folleto del siglo XVIII).
[6] La
Santísima Virgen de los Remedios de los Zacatecas, patrona de la Ciudad, y los
Patriarcas de las Religiones, eran, los dos padres Guardianes franciscanos, el
de Zacatecas y el del Colegio de Guadalupe, Zac., los Priores de San Agustín,
Santo Domingo y de San Juan de Dios, el Comendador del Merced Redención de
Cautivos y el Rector de la Compañía de Jesús.
Detalle del Escudo de Armas de la Ciudad de Zacatecas, siglo XVIII, Museo de Tepozotlán.
Programa volante, colección: Leonardo de la Torre Berúmen.
Escudo de Armas de la Ciudad de Zacatecas que se encuentra en el Archivo de Indias de Sevilla, España.
Escudo de Armas de la Ciudad de Zacatecas que se encuentra en el Archivo de Indias de Sevilla, España.
Acuarela de Otilia Pastrana que realizó con motivo de los 400 años de la fundación de Zacatecas en 1946. Colección: Ruiseco.
Escudo de Armas de la Ciudad de Zacatecas que se encuentra en el Archivo de Indias de Sevilla, España.
Nuestra Señora de los Remedios de los Zacatecas, Patrona de la Ciudad, en la Catedral de Zacatecas, fotografia: Bernardo del Hoyo Calzada. 31 de agosto de 2016.
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